este disco fue una gran alegría que se editó en 1995. Coltrane murió con 40 años el 17 de julio de 1967
No
fue el único que donó su arte a Dios en la basta historia de la
Música, pero él le entregó el día a día, el paso
firme y seguro de su improvisación, ofreciéndole el riesgo que
conlleva el improvisar, ofreciendo el perfeccionamiento del riesgo,
ofreciéndole la poesía y el lamento en uno, eso le diferencia
notablemente de otros que le entregaron una obra meditada en la
tranquilidad que otorga la soledad, como por ejemplo fueron Bach o
Mozart por nombrar a dos de los innumerables músicos que lo han
hecho durante siglos. Coltrane se retiró y volvió a su hogar en
busca de si mismo. Volvió limpio y más creativo que nunca, limpio y
con un nuevo objetivo. Esto no es una charla moralista, ni religiosa,
solamente es decir que alguien que se ha encontrado a si mismo y no
le da miedo mirarse al espejo, es una persona nueva y tiene mucho más
que ofrecer y seguramente es mejor persona.
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